Impresora 3d para ortopedia

Ortopedia impresa en 3D / Ortesis para escoliosis impresas en 3D

Crear dispositivos médicos a medida para satisfacer las necesidades individuales de los pacientes: esa es la función principal y el objetivo primordial de la ortopedia. El uso de impresoras 3D para ello tendrá sentido en el futuro. Luxinergy es una innovadora empresa tecnológica austriaca especializada en el desarrollo de resinas biocompatibles e impresoras 3D de gran formato. Su socio comercial, kerkoc, prueba exhaustivamente los materiales y las impresoras 3D para determinar si encajan bien en el campo de la ortopedia.

Thomas Rockenbauer: La ortopedia es un oficio clásico que crea dispositivos de asistencia a medida. Aquí es exactamente donde las impresoras 3D pueden brillar. La impresión 3D permite adaptar las formas, las funciones y el grosor del material a las necesidades específicas de cada paciente. El proceso de fabricación tradicional suele alcanzar sus límites cuando se trata de estructuras complejas. La producción también es un proceso largo y costoso, pero mientras tanto los pacientes quieren una disponibilidad rápida. A la gente le gusta llevar ortesis impresas en 3D porque se pueden personalizar, lo que también aumenta el efecto terapéutico. Otra ventaja: una vez que el dispositivo ortésico se ha diseñado en el ordenador y se ha construido, puede utilizarse como plantilla y reproducirse con precisión y la misma calidad. Esto puede ser especialmente relevante para las aplicaciones ortésicas pediátricas. En el caso de los niños, la estructura de la órtesis sigue siendo básicamente la misma, pero van creciendo a medida que se hacen mayores.

Impresión 3D de modelos anatómicos para cirugía ortopédica

El proceso fabrica los implantes a partir de los datos anatómicos recogidos del usuario y permite entregarlos rápidamente. Así se evitan los tiempos de espera y las complicaciones debidas a largos periodos de inactividad, por lo que los implantes se ajustan mejor. También acelera el proceso de curación en su conjunto y tiene un impacto positivo duradero en la calidad de vida del paciente.

Los productos pueden diseñarse en función del diagnóstico, sin importar su nivel de complejidad, y pueden fabricarse y entregarse en la clínica en el menor tiempo posible. La fabricación convencional tarda unas 6 semanas, mientras que con la fabricación aditiva, la producción es posible en sólo 10 días.

Para las intervenciones complicadas, los cirujanos recurren cada vez más a instrumentos de un solo uso específicos para cada paciente. Esto permite insertar los implantes con mayor precisión, aumentando el éxito de la operación para los pacientes, los cirujanos y los hospitales. Estos instrumentos personalizados también pueden fabricarse con una impresora 3D. El cirujano se beneficia de un producto de alta calidad y precisión que cumple las estrictas normas asociadas a las aplicaciones médicas.

Stryker 3D Printing for Artificial Joints; From R&D to Production

Fig. 1Tumor sacro. Flujo de trabajo. Imágenes radiológicas del paciente a-c, Modelo digital 3D d, Productos [Biomodelo impreso en 3D y Guías quirúrgicas] e, Utilidad del producto [Utilidad intraoperatoria] fImagen a tamaño realEn este estudio, hemos definido las siguientes variables de actividad para analizar el proceso de fabricación aditiva:

Las variables cuantitativas se han descrito con medidas de centralización (media y mediana); las cualitativas como números y porcentajes.ResultadosSe han realizado un total de 623 procesos de fabricación aditiva en el Departamento de Cirugía Ortopédica y Traumatología durante el tiempo estudiado. Las líneas de investigación (Investigación básica, Investigación 3DP, Proyectos de colaboración universitaria) son las que presentan una actividad más significativa (38,84%). Otras áreas de conocimiento que realizaron un número importante de procesos fueron Ortopedia Oncológica (21,86%) y Traumatología (20,06%). Aunque el número de procesos anuales ha sido similar, se observa una evolución diferente por áreas de conocimiento, con un mayor número de procesos identificados en líneas de investigación específicas (investigación 3DP, proyectos de colaboración universitaria) en los dos primeros años. Los datos detallados se muestran en la Tabla 1.

La impresora 3D ayuda a las caderas – Mayo Clinic

La impresión en 3D es el proceso de creación de un objeto sólido dimensional a partir de un archivo digital, si se quiere simplificar. La impresora 3D va añadiendo capa a capa, lo que crea una sección fina del objeto. En realidad, la impresión 3D es una forma común de fabricación aditiva.

La impresión 3D se utiliza habitualmente en la ortopedia para crear implantes, dispositivos e instrumentos personalizados. En ortopedia, la impresión 3D también se ha utilizado para la planificación preoperatoria y para enseñar a estudiantes y pacientes más sobre los procedimientos.

La planificación preoperatoria y la impresión 3D suelen ir de la mano. Cuando se trata de la planificación quirúrgica, se utiliza ampliamente para fabricar modelos impresos en 3D que pueden utilizarse en casos ortopédicos complejos.

Lo mismo ocurre con las guías quirúrgicas. Estas guías se pueden utilizar de forma intraoperatoria para realizar cortes óseos precisos. Este proceso reduce el tiempo quirúrgico y tiene amplias implicaciones para el paciente, el cirujano y el hospital.

La duración de la cirugía, así como su eficacia, pueden mejorarse al tiempo que se garantizan mejores resultados para el paciente. Casos como las deformidades complejas pueden tratarse con mayor eficacia utilizando plantillas de guía específicas impresas en 3D que se ajustan directamente al hueso.